sábado, 26 de mayo de 2012

ALMA


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Espíritu renacido dos veces dos,
Rumor de la vida, dos.

Disolución del Ser para hallar al Ser...
Despareciendo y renaciendo,
Aguas primigenias; aguas eternas...
Siempre agua; siempre Sol.

Alma marchita; alma sedienta,
Marchita el alma; marchita la pena,
Pena del alma; pena postrera,
Naufragio del alma; alma serena.

Rumor de vida, rumor de viento, suave ligero que se aproxima sin permiso, acariciando la pena del alma.

Alma serena casi marchita, sin fuerza, cansada, en espera.

Fuego del corazón; aire en ignición,
Sabiduría del alma; luz en expansión,
Espíritu sublimado; aliento en deflagración,
Alma inquebrantable; fulgor sin prevención.

Fuerza en vida; camino sin temor,
Lucha en la ruta; batallas sin remisión,
Guerras continuas; movilizaciones eternas,
Siempre despierto; dispuesto en lo eterno.

Es el agua quien nutre y se aleja para recordar que nada es permanente, nada se almacena, igual que la pena que arrastra el viento como naufrago a la deriva. Es la tierra quien la abraza acoge y al mismo tiempo libera.


Elisenda Gimbernat y Santiago Peña


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